Una zona de día diáfana, elegante y equilibrada |
La cocina se abre directamente al salón y al comedor, sin barreras que dificulten la comunicación entre usuarios. El mobiliario, un diseño de líneas puras en color gris, se fusiona de manera natural con el interior de la vivienda. La distribución en paralelo permite disponer de todo lo necesario para trabajar sin apenas desplazarse, facilitando las tareas diarias. La isla concentra las zonas de preparación, cocción y lavado, además de incluir en la parte externa una barra para cuatro comensales. La composición de armarios columna, por su parte, integra los electrodomésticos e incluye también un espacio de desayunos en el interior de un mueble escamoteable.